Que vivan las quincenas

Las quincenas son maravillosas; desde siempre me ha gustado la palabra y me trae buenos recuerdos. Quince días es la periodicidad típica de muchas revistas y cómics. Recordemos el "QUINCENAL" en la tapa de muchos de ellos.

Quince días es el número típico de días de colegio en Junio, esos días en que sólo vas por la mañana y tienes las tardes libres, como preludio de las vacaciones por venir.

Quince días es lo que una adulta se suele tomar de vacaciones, como es el caso este año. Dado que hoy es uno de junio, casualmente empiezan en quince días, el día 16. Y en más o menos quince días (cuando vuelva), me iré a Valencia a observar los estragos que deja esa convención de fanáticos que idolatran a cierto personaje apodado Nazinger, por ejemplo, y a la boda de una prima, que se casa el día quince.

Quince telediarios le doy yo a cierto cuchitril, por cierto, viendo la catástrofe que se está armando lenta pero inexorablemente. Como he dicho hoy, esto es como ver hundirse al Titanic sabiendo que un helicóptero está esperando fuera para rescatarte.

¡Y que vivan las quincenas!